Ley N°30151: “Artículo 20°” – Inimputabilidad “Está exento de responsabilidad penal el personal de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional del Perú que, en el cumplimiento de su deber y en uso de sus armas u otro medio de defensa, cause lesiones o la muerte.”
1. La policía -como institución- no se inventó y no existe para “proteger” a la población, sino para proteger las propiedades de los grupos de poder económico-político, y mantener el status quo que ellos manejan. Del mismo modo, la función de un ejército nunca ha sido defender “la paz”, sino defender -a través de la guerra- la expansión territorial de los imperios que antecedieron a nuestros actuales Estado-Nación.
El miedo es una cárcel sin barrotes
2. La policía no existe para acabar con la “inseguridad social”. La policía necesita de esa inseguridad y de la misma “violencia social” que dice combatir (pandillaje, delincuencia, drogadicción, narcotráfico, etc.) para justificar su existencia. La policía necesita que la población sienta miedo e inseguridad para naturalizar su propia violencia legal al servicio del control municipal-estatal, y presentar como lógicas sus reformas represivas (Servicio Militar Obligatorio, Inimputabilidad, Pena de Muerte, etc.).
3. La policía, junto con el sistema judicial, existe para anular la autonomía en la resolución de conflictos. Para impedir que la población se auto-organice para protegerse, defenderse y resolver sus propios problemas o contradicciones (o para liberarse de la imposición o invasión externa del Estado).
4. El aumento de represión legal es tan preocupante como la falta de auto-organización social, porque de hecho ambas situaciones tienen una profunda relación. Una población sin comunicación y organización barrial es débil e insegura, aunque haya la ilusión de seguridad porque un guardia alquilado, serenazgo, cámara de vigilancia o perro guardián vigila cada hogar. Una población con miedo es incapaz de organizarse, transformarse o liberarse.
Estamos en todas partes
5. No luchamos para mejorar las condiciones laborales de la policía, ni buscamos una institución “más humana” o “mejor capacitada”. Luchamos por la abolición de la institución policial-militar, pero esto no será posible si antes no son abolidas todas las instituciones y relaciones que reproducen la organización social estatal-capitalista global. Por eso, en el presente y en nuestra localidad, es necesario imaginar y poner en práctica relaciones, situaciones y espacios que funcionen más allá de la legislación estatal y cualquier forma de autoridad:
a) En este caso se trata de luchar contra la existencia de la Ley 30151, denunciar su estupidez, pero sin olvidar la propia genealogía represiva de la policía, las leyes y el sistema de justicia.
b) Generar espacios de comunicación y auto-organización social-barrial. Es la única forma que realmente puede permitir que las personas se sientan seguras y capaces de hacer respetar los lugares donde viven y a ellas mismas a través del apoyo mutuo y la autodefensa; también es la principal forma de prevenir (a mediano, corto y largo plazo) la violencia social (innecesaria) entre personas de la misma condición o comunidad.
Texto repartido en la ciudad de Lima, tras la declaración de la Ley N°30151.